“ LAS SEMILLAS DE MOSTAZA”
En
El Salvador, un día la pequeña mano del hombre golpeo con furia varias partes
del cuerpo de la naturaleza, primero con palas, piochas, corvos y comenzó a
talar indiscriminadamente los arboles de la Cordillera El Bálsamo y El Volcán
de San Salvador, destruyendo así las áreas boscosas, de donde nacieron y
subsisten cinco quebradas hermanas, de nombres: Quebrada Suncita, Quebrada
Buenos Aires, Quebrada El Triunfo, Quebrada La Lechuza y Quebrada El Piro,
estas quebradas muchas veces al año se reunían con su hermano el Rio Acelhuate,
y al hombre no le importó, construyo casas en tierras altas, perforando los
pulmones de El Salvador; durante años el hombre permaneció matando a la
naturaleza sus hijos los arboles de café, que benévolamente hacían productiva
la tierra salvadoreña, y los cultivos y muchos otros árboles, se le olvido al
hombre que estos árboles le daban trabajo, que le servían para el sustento de él
y su familia, y aunque a veces el precio del café bajaba, todavía le
beneficiaba, se le olvido al hombre que los arboles hacían fértil la tierra, y
que ayudaba a respirar saludablemente a muchos salvadoreños, y unos pocos
hombres decidieron por todos, y dijeron:¡Talemos!.
La
naturaleza les decía: no maten a mis hijos, si los matan ustedes también morirán,
los arboles sirven para la retención del agua, no podrán subsistir sin ella, si
lo hacen los ríos se desbordaran, mi cuerpo tiene partes de tierra blanca, en
esos lugares pueden construir sus casas; y las partes altas y todo lugar donde
existe tierra negra, no deben construir, ya que son para el cultivo, para
sembrar café, para el maíz y el frijol y otra clase de alimentos, para la
comida de muchos, aun de toda clase de animal, y aunque no tengan dinero, no
van a tener necesidad de robar por hambre, escúchenme…Estoy a punto de tener cáncer
de pulmón…y todos sufriremos las consecuencias, yo padeceré mucho dolor; y
fiebres por la enfermedad, padeceré hemorragias, por no poder retener el agua;
mis hijas las cinco quebradas se desbordaran, se unirán con su hermano el rio
acelhuate, y habrá grandes desastres, nosotros sufriremos, pero muchos de
ustedes aun los inocentes morirán.
Pero
no quisieron escucharla, pocos hombres dijeron: Vamos hagamos dinero, talemos,
cambiemos los cauces naturales de los ríos, pongámonos de acuerdo con las
autoridades, hagamos urbanizaciones en los lugares altos, saquemos buen dinero,
entre más altas queden las casas y mejor vista tengan pagaran más dinero…Vamos
camino a la modernización, de todos modos estas tierras son nuestras, queremos
vivir bien, y con ese dinero nos vamos a cualquier parte del mundo a vivir y
disfrutar mucho, quien sabe si amanezcamos, saquemos buen pisto amigos, porque
bien dice el dicho “ comamos, bebamos y hagámonos gordos, y cuando la naturaleza
nos cobre, hagámonos los sordos”.
Y
se pusieron de acuerdo con muchas autoridades que no tuvieron voluntad política,
las autoridades se pusieron lentes muy oscuros para no ver la tala
indiscriminada de árboles, que se hacía a plena luz del día, y muchas veces
talaban de noche y al siguiente día, ya no había árboles, algunas instituciones
protestaban; pero las autoridades se pusieron tapones en los oídos, para no
escuchar las protestas, no le dieron protección a la naturaleza, ni se
opusieron a que esos hombres hicieran uso irracional de los recursos de la
naturaleza, y dijeron: “Vamos a tapar esas protestas con unas cuantas obritas
de mitigación, pongámosle por ejemplo a cincuenta metros del arenal Monserrat,
una obrita de mitigación, no se preocupen no creo que gastemos mucho dinero en
eso, o hagamos un par de trabajos parciales sin mayor cantidad de obras de mitigación,
para contener muchos miles de metros cúbicos de agua, del desbordamiento de las
aguas de las quebradas hermanas, unidas a su hermano El Rio Acelhuate, ¡Ah!.. y
dejemos para después alguna que otra obra de prevención…¡Ah, ya!...una gran
idea, hagamos una bóveda donde caiga el agua que la tierra no puede tomar, y pongámosle
unos metros de ladrillo arriba para detener el agua”…
Y
así esos hombres hicieron cambios en los cauces de los ríos, instalaron tuberías
que jamás cambiaron y se mantuvieron obsoletas, y ningún gobierno por mas
reclamos, por más protestas, nunca hizo realmente nada; y decían: “Pongamos
hileras de ladrillos con esto detendremos el agua de los ríos, así nada va a
pasar, hay que acordarnos que queda un puntito débil, vulnerable, una pequeña
curvita, hay algunos desbordamientos y deslaves, y estemos tranquilos, nada
va a pasar”… Y muchos ciudadanos
aventaron la basura en las calles, y las tuberías obsoletas se taparon, y el
caudal del Rio Acelhuate, se desbordaba cada vez más, dando avisos de lo que
estaba por pasar… y se incrementaron los riesgos.
Y
decían: “ Sigamos talando, que la modernización debe continuar”…Pero a todos se
les olvido que la mano de la naturaleza era tan grande, que ni con la mejor tecnología
podían hacer reversibles los efectos del daño causado, y cuando se enfureciera,
arrastraría aun a su tecnología; y los
pocos hombres degradaron el medio ambiente, y no realizaron las acciones de prevención
y restauración a la naturaleza, para cuidar y salvaguardarla, la naturaleza daba muchos indicios con
inundaciones no pequeñas de su cáncer, causado por la avaricia y codicia de
unos pocos, que solo vieron la belleza de la modernización; y de los clamores
de la naturaleza hicieron caso omiso, y talaron los árboles, desequilibraron
los cerros, y al no tener la naturaleza la forma de cómo distribuir y detener
el agua en sus pulmones, comenzó con muchos síntomas, en cada invierno el cáncer
de la naturaleza; agravo cada vez más, el cauce de los ríos se desbordaba, y
muchos anteriormente perdieron la vida…se los llevo la corriente.
Pero
un día tres de julio de dos mil ocho, una de las manos de la naturaleza
reacciono, la lluvia comenzó con fuerza y buscaba con furia entrar a la tierra,
mas como no pudo; comenzó a buscar cómo salir, las cinco quebradas hermanas no
pudieron mas, buscaron refugio en su hermano el Rio Acelhuate, y casualmente a
la altura de la Colonia Málaga, fue la reunión del desangramiento excesivo de
las cinco quebradas hermanas, junto con su hermano el Rio Acelhuate, y en esos
momentos, en un bus color amarillo, con letrero de plástico que decía “CRISTO
VIENE PRONTO”, un grupo de cristianos venían gozosos, de una reunión especial,
de una Iglesia llamada Elim Central, estaban preparándose para enseñarles y
presentar el amor grande del Señor, por medio del Evangelio de nuestro Señor y
Salvador Jesucristo, a muchos que destruidos por sus pecados, necesitan el perdón
de Jesucristo. Cuando de repente la sangre de la naturaleza los comenzó a
investir; rápidamente los hermanos comenzaron hacer muchas llamadas para pedir
auxilio; había desesperación; el hermano Melvin, un joven salió del bus e
invito al hermano Fabricio, otro joven para que salieran y vieran como poder
ayudar a sus hermanos; el hermano Melvin se quedó arriba del bus con todos sus
hermanos; el no temía a la muerte, imagino que sabía que estaba en el momento
justo y en el lugar que Dios, quería; sabía que lo que El Padre en ese momento decidía,
eso era lo mejor; el hermano Fabricio se lanzó, los vecinos les tiraron lazos,
y una mujer corría llamando a miembros de rescate, que imagino por temor y el
terror, nunca llegaron; habían espectadores, fueron los minutos más cortos y más
memorables y tristes para muchos, eran minutos de lágrimas, de amor y valor, de
angustia, de desesperación, la sangre de la naturaleza los amenazaba
ferozmente, y nadie podía hacer nada para detenerla; los gritos de la
naturaleza eran aterradores, en ese momento al saber los hermanos, que nada ni
nadie podía hacer nada, se encomendaron a nuestro Dios, y entre cantos y expectación
apareció El Salvador, y les dijo: “MI
PADRE ME HA ENVIADO, he venido por vosotros YO JESUS VUESTRO SEÑOR, y en esta hora de aflicción aquí está EL CONSOLADOR, Mi Padre y vuestro
Padre, y nuestros hermanos esperándonos están, pasaremos juntos el valle de la
sombra y de la muerte, YO OS GUIARE, NO
TEMAIS, CON VOSOTROS ESTOY, y nos
vamos a la casa del Padre, a vuestro eterno hogar”.
“Quiero
que sepan que Ofrenda de Olor Grato Me Son, hijos míos vamos ya a la Gran Mansión”.
Esas palabras confortaron sus corazones, y se llenaron de fuerza y valor; “cantemos
más fuerte dijo un hermano, alabemos a nuestro Señor”, de pronto un calor
dentro de sus cuerpos y una paz invadió sus corazones, y entonaron por última
vez un cantico triunfal… cerraron sus ojos y las alas del Altísimo, se abrieron
y los abrigaron. El bus comenzó a, dar
vueltas, y al ser arrastrado por la corriente, las voces pronto dejaron de
cantar. El Señor Jesús, lleno de amor iba delante de ellos, guiándolos por el
camino a la casa del Padre, y una puerta llena de luz se abrió, y una fuerte
voz como estruendo y como las muchas aguas, dijo: “ PASAD HIJOS BENDITOS,
AMADOS DE MI PADRE”. Y esos pocos minutos se hicieron eternos…
Afuera
muchas personas derramaban lágrimas de dolor, de impotencia, de terror, querían
ayudar y no podían, otros huyeron del lugar, porque tenían temor de convertirse
en víctimas de la misma tragedia en el mismo lugar.
Y
esas semillas de mostaza, dieron mucho fruto para El Padre, ese día; muchos estábamos
dormidos y ese momento tan doloroso, significo la fuerza y el valor para seguir
adelante, como El Señor Jesús, ellos también estaban dispuestos a que pasara lo
que pasara se hiciera la voluntad del Padre; son y han sido héroes espirituales,
que dejaron de ser anónimos, ellos no podían hacer algo superior, porque pasara
lo que pasara, sabían que eran de Dios por Jesús, y a él iban; y ese testimonio
llego a la vida de miles, para anunciar como el atalaya , que anunciaba a todo
el mundo, una noticia tan importante que ni la furia de la naturaleza con sus
rocas, ni los arboles destruidos, ni el lodo, no pudieron destruir, fue ese
rotulo de plástico que dice el anuncio más importante de la historia humana…el
anuncio que CRISTO VIENE PRONTO.
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